Todo lo que logramos y todo lo que dejamos de lograr
es resultado directo de nuestros pensamientos.

. James Allen

domingo, 13 de febrero de 2011

¿Fórmulas mágicas? Perseverancia y disciplina..

Hay un cuento donde un personaje misterioso le ofrece a otro buena figura, excelente trabajo, buena posición econòmica y todo por casi nada: sólo debe cumplir una rutina diaria de eso, ejercicio, estudio, trabajo y tiempo para su familia. El hombre misterioso le advierte que de incumplir, el castigo será realmente ejemplar. El segundo sujeto acepta pues los beneficios que le ofrecen son realmente atractivos. Al principio sigue la rutina, muy juicioso: gimnasio, trabajo, estudio, familia... pero un dìa decide no levantarse a las 5:00 a.m. a trotar y en su lugar seguir durmiendo plácidamente. El castigo que recibe es la pérdida de un dedo de su esposa, por lo que jamás, jamás vuelve a incumplir el pacto. Poco tiempo después se reune con un amigo quien le felicita por su excelente estado físico, su buena posición económica y familiar. El personaje de esta historia le dice que si promete cumplir con una rutina, le cuenta el secreto de su éxito.

Parece una obviedad pero definitivamente casi cualquier objetivo puede ser logrado a través de la perseverancia y la disciplina. Hay que pagar el precio. ¿Cuántas veces no hemos escuchado a alguien quejarse de su figura y a pesar de esto no aporta nada de su tiempo, ni su esfuerzo para cambiar esta situación? Sencillamente prefiere seguir así a las incomodidades del ejercicio. Es sencillo.

Por tanto preguntémonos: ¿qué quiero? y ¿qué estoy dispuesto a dar por esto?